LA
NUEVA HUMANIDAD
SUEÑA
CON NIÑOS GENÉTICAMENTE MODIFICADOS
PARA
SER INVENCIBLES.
Yo
deambulo insomne,
intrigada
por cómo sobrevive
el
resto de mi especie que no entiendo,
que
no me entiende,
como
si un gen de un antepasado remoto
se
hubiese colado en mi ADN
y
hubiese modificado ligera
pero
catastróficamente mi neurodesarrollo.
¿Y
si un cráneo moderno esconde un cerebro prehistórico?
¿Y
si estas manos torpes y esta estupidez prominente
son
solo vestigios de otra humanidad extinta?
A
menudo me oculto en mi casa-cueva
de
los sapiens que me intimidan.
Me
hago preguntas que solo un pormenorizado estudio neuroanatómico
podría contestar.
Pinto,
sin intención, retratos de evidente corte rupestre.
Miro
con nostalgia en la pantalla
reconstrucciones
de esqueletos neandertales
que
podrían haber sido mi mejor amigx
o
el amor de mi vida.
Miro
a la penúltima civilización pasar a la última moda
a la penúltima civilización pasar a la última moda
y
me rindo